Simplemente, somos demasiados
Autor: Juan Carlos Ramírez Larizbeascoa
Parlamentario Andino
República del Perú

Los números tienen la ventaja de ser vehículos de la verdad. Mientras que las palabras están sujetas, en general, a la interpretación. Y la verdad es que el planeta tierra ha pasado de 4 billones de habitantes en el año 1980 a casi 8 billones en el 2022. Gruesamente, la humanidad se ha duplicado en solo cuarenta años. Solo cuarenta años.
Para hacerse una idea casi geométrica de lo que esto significa: si se pusieran acostados en la línea del Ecuador a todos los seres humanos, uno a continuación de otro, le darían 330 vueltas a la tierra. Y podrían ir y venir de la tierra a la luna 17 veces. Es que es una cifra enorme.
Todas las desgracias a las que asistimos: desempleo o subempleo masivos, hambre, migraciones numerosas, levantamientos desde Sri Lanka a Panamá, criminalidad desatada, basura en los mares y la tierra, inflación y alza de los precios, escasez de alimentos, salinización de las tierras, calentamiento global, deforestación, y una larga lista de etcéteras tienen la misma causa: somos muchos.
Y no solo somos muchos, somos más gordos, como lo indica el Índice de Masa Corporal promedio de los países de la OCDE, rayano en la obesidad; también somos más viejos, como lo indican los cambios en la edad promedio de prácticamente todos los países, y estamos prácticamente subempleados o desempleados.
Sobre el último punto, el desempleo aceleró desde los setentas, y seguirá acelerando por varias causas adicionales al crecimiento demográfico descontrolado. Entre estas causas está el ingreso de la mujer al mercado laboral, con lo que se duplica la oferta de empleados, y también el notable incremento de la tecnología que desplaza trabajo. No solamente las plantas robotizadas, pero también el tamaño de los equipos, como la calidad del software aplicado en bienes y servicios lleva siempre a la reducción de la demanda por trabajadores.
En cosas tan cotidianas como los cajeros automáticos de los bancos puede verse como se desplaza trabajadores cada vez más. En trabajos de campo, como agricultura o minería, puede notarse como se desplaza cada vez más el empleo de seres humanos. Para hacerse una idea, un volquete de 420 toneladas en minería desplaza a por lo menos cinco mil personas en un turno de ocho horas. Un volquete eliminó 5,000 seres humanos. Y hace el trabajo con mucha más eficiencia, sin cansarse, y es más barato.
Ciertamente, no todos crecen, o decrecen, al mismo ritmo. Por un lado los países como Alemania, Noruega o Japón tienen tasas negativas de crecimiento, otros, como todo el continente africano o los árabes tienen tasas muy altas de natalidad y crecimiento demográfico. Por ello se ve migración tan intensa desde Africa y Medio Oriente hacia Europa.
El nivel de la hambruna es también descomunal. A la fecha más de 1.6 billones de personas (es decir 1,600,000,000 personas) sufren hambre. Esto es tan intenso que el mismo Secretario General de la FAO se puso en huelga de hambre para que se tome conciencia del problema. Y es cierto que, como decía Goebbels, mientras que un muerto es una tragedia un millón de muertos es solo estadística. Porque pareciera que nadie se da cuenta del único problema: SOMOS MUCHOS.
Y somos muchos porque hemos sacramentalizado la vida por el solo hecho de existir, y no la vida con sentido, con propósito, con recursos. A tal punto, que nos hemos olvidado que el planeta es finito, pequeñito y limitado. No resiste una especie tan prolífica, expansiva, irracional y voraz como la nuestra.